¿Qué es la "exposición al sol"?
Cualquier tiempo al sol con la piel sin protección, se conoce como exposición al sol. Cualquier momento en que esté al aire libre más tiempo de lo normal podría considerarse "excesivo". Incluso en un día nublado, los rayos ultravioleta del sol podrían dañar su piel. Para minimizar la posibilidad de que la piel se dañe, puedes usar protector solar, llevar ropa protectora, controlar el tiempo de exposición y seguir una rutina para proteger tu piel de los daños.
Encontrar el protector solar adecuado
FPS significa Factor de Protección Solar, es decir, la intensidad de la protección solar y la eficacia con la que protege la piel de la exposición a los rayos UV. Aunque la mayoría de las marcas de productos para el cuidado de la piel recomendadas por los dermatólogos, como Neutrogena y Aveeno, venden protectores solares con un FPS de hasta 100, cualquier protector solar con un FPS de 15 o más protegerá el 93% de tu piel siempre que lo utilices siguiendo las instrucciones de la etiqueta. Cuanto más alto sea el FPS, más se acercará al 100% de protección. Si tiene un historial de piel dañada o sensible, es muy recomendable que utilice el protector solar con el FPS más alto que pueda encontrar. Es igualmente importante volver a aplicar el protector solar según las indicaciones a intervalos regulares durante el día. Esto es especialmente importante si entra y sale del agua, y para los niños cuya piel es más sensible a los rayos UV.
Viste bien para proteger tu piel
Cubrirse para proteger la piel del sol es una de las mejores y más fáciles maneras de estar a salvo. Incluso con el calor, hay algunas formas inteligentes de añadir capas sin dejar de sentirse fresco. La mejor opción es llevar un sombrero, que cubra la piel sensible de la parte superior de la cabeza y las orejas, además de proporcionar algo de sombra a la cara y los ojos. Otra es llevar ropa que "respire" o que permita que el aire circule alrededor de tu cuerpo. Ponerse un chal al salir del agua es siempre una buena idea. Además, recuerda proteger la piel sensible de la parte superior del pie. Es fácil de olvidar, pero es muy dolorosa una vez que se ha quemado con el sol. Llevar sandalias que cubran la parte superior del pie, incluso con algunos agujeros, es siempre mejor que las chanclas o no llevar calzado.
Después del sol: Rutina de cuidado de la piel en verano
Cuando disfrutas de un tiempo al sol, puedes notar algunos cambios en tu piel. El más común podría ser una quemadura solar. Tu piel se sentirá muy caliente y tensa, y con una necesidad desesperada de cuidados tiernos y cariñosos:
- Aplique aloe o una loción hidratante de venta libre a su piel según las indicaciones.
- Para calmar y refrescar la piel, tome un baño o ducha fría o aplique compresas frías en la zona.
- Para el dolor, tome su analgésico recomendado.
- Si se forman ampollas, no las rompas.
- Proteja su piel de una mayor exposición al sol.
- Recuerda siempre rehidratarte con agua, zumo o bebidas deportivas.
Cuándo acudir al médico
Hay que llamar al médico si la quemadura solar forma ampollas o la piel aparece pálida o entumecida, y siempre si un niño menor de un año tiene una quemadura solar. Debe llamar al 911 si una persona expuesta al sol no parece responder adecuadamente, tiene una convulsión, cambios visuales o cualquier otro síntoma neurológico, ya que podrían ser síntomas de una enfermedad grave por el calor. Además, siempre hay que revisar la piel para detectar cualquier cambio. Tanto si se trata de cambios en las pecas, lunares o manchas de la piel que ya tiene, como de nuevas pecas, lunares o manchas de la piel. Fíjate en el tamaño, la forma y el color. Cualquier cambio anormal en estas tres cosas es motivo para pedir una cita con tu médico de cabecera.
A menudo asociamos un cutis brillante con la buena salud, pero el color de la piel obtenido por estar al sol -o en una cabina de bronceado- en realidad acelera los efectos del envejecimiento y aumenta el riesgo de desarrollar cáncer de piel. La exposición excesiva al sol puede dañar permanentemente el tejido cutáneo y provocar lesiones cutáneas precancerosas y cancerosas debido a la disminución de la función inmunitaria de la piel.
Recuerde que siempre debe hablar con su proveedor de atención médica sobre cualquier problema de la piel que pueda tener. Puedes pedir una cita ahora buscando tu centro CommuniCare más cercano. Tú y tu familia podéis divertiros juntos al aire libre este verano, ¡y estar siempre seguros del sol!